Y después de unas semanas de ausencia prácticamente obligada, aunque no os voy a dar la lata con ello porque todos tenemos nuestras cosas, por fin puedo retomar, (más o menos, porque en agosto quiero aprovechar algún ratito para hacer cambios), mi actividad bloggeril y no he encontrado mejor compañía para hacerlo que el equipo Dhyvana, que ya os digo, es uno de los mejores descubrimientos de este 2017, y ahora lo entenderéis...
Dhyvana es una propuesta alternativa a la cosmética tradicional, marca que apuesta por la creación de productos para el cuidado facial libre de toxinas y sobretodo prejuicios, para que las mujeres reales, nos mostremos con orgullo ante el mundo y nos sintamos a gusto con nuestro cuerpo.
Con la certificación alemana BDIH, que garantiza que sus productos son orgánicos, de acuerdo con el estándar internacional COSMOS, nos garantizan que todos los ingredientes de sus productos no han sido testados en animales, no contienen derivados del petróleo ni aditivos sintéticos (parabenos, siliconas, perfumes, colorantes, etc.), que tienen trazabilidad hasta el origen y que su manipulación ha sido sostenible con el medio ambiente.
En su boutique podéis encontrar en la actualidad 8 productos para que cuidéis de un modo saludable vuestro rostro, entre los actuales se encuentran la línea ECO SUNCARE, compuesta por 3 productos que habéis ido viendo estas semanas por mis redes, y de los os voy a hablar hoy, aunque no os preocupéis os iré hablando de todos los demás, espero que muy pronto, en el blog.
Vamos a ello.
SPF50 PROTECTOR SOLAR ECOLÓGICO.
Al estar expuestos al sol de un modo continuo, y más ahora en la época estival, la radiación solar provoca que nuestras células se oxiden, y eso conlleva que la elastina y el colágeno de nuestra piel se deterioren a la par que se acelera el proceso de envejecimiento cutáneo. Y es por ello que es de suma importancia que nos protejamos cada día con un fotoprotector adecuado.
El filtro solar de SPF50 es 100% mineral y es un protector de barrera de amplio espectro que nos protege de las radiaciones UVA, UVB y de la radiación infraroja, y además aporta hidratación y nutrición, gracias a su base hidratante de aloe vera y aceites secos.
Pero para que este producto sea mucho más efectivo, el equipo Dhyvana ha complementado los filtros físicos con extractos botánicos de salvia, romero y tomillo, haciendo que ejerzan una acción filtrante por fotoionización gracias a los hidroxicinámicos y flavonoides. Así pues, todo ello hace que actúen en sinergia con los filtros minerales para que éstos sean mucho más efectivos con el fin de proteger nuestra piel de los rayos ultravioleta.
Pero si esto no fuese poco, además el producto tiene un toque de color para que se funda de un modo perfecto y uniforme con todos los tonos de piel sin dejar un aporte graso y dando luminosidad en nuestra piel.
Este protector es apto para todo tipo de pieles y está testado desmatológicamente para pieles sensibles.
Envase de 50ml, precio 21,50€.
Ingredientes.
Modo de empleo.
Aplicar uniformemente antes de la exposición solar. Repetir al menos cada 2 horas para mantener la protección o con mayor frecuencia especialmente después de sudar, nadar o si nos secamos con una toalla.
Valoración.
Ya os digo que me voy a dejar muchas cosas en el tintero para no extenderme, porque creerme, podría estar horas y horas hablando de este producto.
Para empezar, si me conocéis un poquito ya, sabréis que soy de esas quisquillosas que si algo no les entra por la vista... mal, a la par que no me gustan los diseños recargados al más puro estilo "rococó".
Así pues, cuando vi el diseño de la caja y producto, bueno sinceramente, el diseño de todos los productos de Dhyvana, mis ojos se tornaron en corazoncitos como el archifamoso emoticono del Whatssap.
Un diseño fresco, sencillo, limpio y con una tonalidad de colores, que personalmente me aportaron confianza y una asociación inmediata al bienestar. (Ya sabéis que los colores, seamos conscientes o no, juegan un papel muy importante).
Pero centrándome en el producto SPF50, su envase y caja combina los colores blanco y verde menta, que ya sabéis que me chifla ese color, y nos aparece la hoja del logo de Dhyvana, que es sencillamente bonita.
Guiándome por los consejos de Aurora, mi asesora personal del equipo Dhyvana, lo he usado para los días de piscina, para esos encuentros en terracitas con amig@s y para las excursiones por el campo y montaña, ya que han sido los momentos en que más he estado expuesta al sol y al tener una protección mayor era el ideal para esos momentos, por lo que me he reservado el SPF30, del que os hablaré a continuación, para momentos de menos exposición.
Aunque no es un maquillaje debo confesar que sí lo he usado como tal, es decir, podríamos decir como base, en esos días en que no he tenido ni pizca de ganas de ponerme capas de maquillaje, para evitar parecer un muñeco de cera deshaciéndose a causa de las temperaturas extremas que tenemos en mi tierra. Vamos, me he aplicado la crema, un poco de eyeliner y a correr, pero ojo, aunque aporta un toque de color y unifica a la perfección el tono de piel, no penséis que aporta la misma picmentación que un maquillaje, porque no es así. Pero al tener una piel hipermega blanca, toque de color que aporta este protector, que no nos olvidemos, es un protector, a mi me vale y sobra.
Sobre su textura, es un poco densa, pero se extiende a la perfección, y aunque al principio deja un tono blanquito (recordad que es una crema) se absorbe muy rápidamente y lo mejor de todo, no te deja la piel para nada grasienta, cosa que puede pasar con algunos protectores solares faciales, y súper uniforme.
El olor, es casi impredecible, pero si te fijas, bueno si agudizas un poco el sentido del olfato sí se aprecia un toque muy sutil a una combinación de plantas, creo que el que más aprecio es el romero, pero ya os digo, es muy sutil.
SPF30 PROTECTOR SOLAR ECOLÓGICO.
De este protector podría decir lo mismo que os he comentado sobre el SPF50, con la diferencia que el grado de protección es más baja y que en esta ocasión han añadido aceite ecológico de frambuesa, aceite fotoprotector de amplio espectro UV, además de contener tocoferoles y agentes antioxidantes naturales que son muy efectivos, lo que hará que nuestra piel esté protegida de la aparición de radicales libres y del estrés oxidativo.
En su formulación, igual que en el anterior, se ha añadido un toque de color.
Envase de 50ml y su precio es de 18,50€.
Ingredientes.
Modo de empleo.
Al igual que el SPF50, aplicar uniformemente antes de la exposición solar. Repetir al menos cada 2 horas para mantener la protección o con mayor frecuencia especialmente después de sudar, nadar o si nos secamos con una toalla.
Valoración.
El formato de envase y caja es el mismo que el anterior, lo único que cambia es la combinación de colores, que en este caso juega con el rojo, el rosa y el blanco.
Este producto es mi protector para mi día a día. Igual que en el anterior gracias a su toque de color, lo estoy usando a modo de maquillaje también, aunque os recuerdo que no lo es puesto que no aporta una picmentación como la que podremos encontrar en una base de maquillaje, pero para mí es ideal puesto que no suelo maquillarme en exceso durante el día, y menos para ir al trabajo.
A diferencia del anterior su textura es más fluida, y el tono es un pelín más oscuro, pero sí que igual que el SPF50, se extiende a la perfección y se absorbe de inmediato, dejando mi piel luminosa e hidratada.
Tema olor, me pasa también como con el SPF50, no se aprecia a priori pero sí si agudizas el olfato puedes apreciar el toque de mezcla de plantas.
POST SOLAR.
El hecho de que expongamos nuestra piel a diario a la radiación solar provoca que se produzca una oxidación celular, tal y como os he comentado antes, lo cual hace que se deteriore la elastina y el colágeno de nuestra piel a la vez que se acelera el proceso de envejecimiento cutáneo.
Por ello es de vital importancia que reparemos la piel tras una exposición solar para poder prevenir el desgaste prolongado y el estrés oxidativo.
Este post solar esta formulado con una base de aloe vera y aceite de rosa mosqueta, ingredientes que están complementados con extractos de tulsi, cardo mariano y alga verde, especialmente indicados para calmar y nutrir la piel dañada.
Tiene propiedades antiinflamatorias que ayudarán a calmar la piel y a recuperar el equilibrio después de la exposición solar, a la par que estimulan la formación de colágeno e inhibe su degradación.
Es un producto apto para todo tipo de pieles y está testado dermatológicamente para pieles sensibles.
Su envase contiene 50ml y su precio es de 15€.
Ingredientes.
Aloe barbadensis Leaf Juice*, Maltodextrin, Glycerin*, Coco-Caprylate/Caprate, Coco-caprylate, Cetearyl Alcohol, Jojoba esters, Arachidyl Alcohol, Aqua, Propanediol, Helianthus annuus Seed Wax, Rosa canina Fruit Oil*, Acacia decurrens Flower Wax, Enteromorpha compressa Extract, Calendula officinalis Flower Extract*, Silybum marianum Fruit Extract, Ocimum sanctum Leaf Extract, Behenyl Alcohol, Glyceryl Caprylate, Arachidyl Glucoside, Xanthan Gum, Tocopherol, Cetearyl Glucoside, Glyceryl Undecylenate, Polyglycerin-3, Citric Acid, Phytic Acid, Benzyl Alcohol, Potassium Sorbate, Sodium Benzoate, Parfum**, Limonene, Linalool.
* Procedente de la agricultura ecológica.
¡Un saludo maj@s!
Dhyvana es una propuesta alternativa a la cosmética tradicional, marca que apuesta por la creación de productos para el cuidado facial libre de toxinas y sobretodo prejuicios, para que las mujeres reales, nos mostremos con orgullo ante el mundo y nos sintamos a gusto con nuestro cuerpo.
Con la certificación alemana BDIH, que garantiza que sus productos son orgánicos, de acuerdo con el estándar internacional COSMOS, nos garantizan que todos los ingredientes de sus productos no han sido testados en animales, no contienen derivados del petróleo ni aditivos sintéticos (parabenos, siliconas, perfumes, colorantes, etc.), que tienen trazabilidad hasta el origen y que su manipulación ha sido sostenible con el medio ambiente.
En su boutique podéis encontrar en la actualidad 8 productos para que cuidéis de un modo saludable vuestro rostro, entre los actuales se encuentran la línea ECO SUNCARE, compuesta por 3 productos que habéis ido viendo estas semanas por mis redes, y de los os voy a hablar hoy, aunque no os preocupéis os iré hablando de todos los demás, espero que muy pronto, en el blog.
Vamos a ello.
SPF50 PROTECTOR SOLAR ECOLÓGICO.
Al estar expuestos al sol de un modo continuo, y más ahora en la época estival, la radiación solar provoca que nuestras células se oxiden, y eso conlleva que la elastina y el colágeno de nuestra piel se deterioren a la par que se acelera el proceso de envejecimiento cutáneo. Y es por ello que es de suma importancia que nos protejamos cada día con un fotoprotector adecuado.
El filtro solar de SPF50 es 100% mineral y es un protector de barrera de amplio espectro que nos protege de las radiaciones UVA, UVB y de la radiación infraroja, y además aporta hidratación y nutrición, gracias a su base hidratante de aloe vera y aceites secos.
Pero para que este producto sea mucho más efectivo, el equipo Dhyvana ha complementado los filtros físicos con extractos botánicos de salvia, romero y tomillo, haciendo que ejerzan una acción filtrante por fotoionización gracias a los hidroxicinámicos y flavonoides. Así pues, todo ello hace que actúen en sinergia con los filtros minerales para que éstos sean mucho más efectivos con el fin de proteger nuestra piel de los rayos ultravioleta.
Pero si esto no fuese poco, además el producto tiene un toque de color para que se funda de un modo perfecto y uniforme con todos los tonos de piel sin dejar un aporte graso y dando luminosidad en nuestra piel.
Este protector es apto para todo tipo de pieles y está testado desmatológicamente para pieles sensibles.
Envase de 50ml, precio 21,50€.
Ingredientes.
Aloe barbadensis Leaf Juice*, Caprylic/capric Triglyceride, Titanium Dioxide, Propanediol, Cetearyl Alcohol, Zinc Oxide, Alcohol*, Coco-caprylate, Maltodextrin, Mica, Decyl Oleate, Alumina, Stearic Acid, Cetearyl Glucoside, Rosmarinus Officinalis Leaf Extract, Thymus vulgaris Flower/Leaf Extract*, Salvia officinalis Leaf Extract, Bisabolol, Glycerin*, Aqua, Mica, Polyglyceryl-6 Distearate, Tocopherol, Glyceryl Caprylate, Xanthan Gum, Polyglyceryl-3 Beeswax, Glyceryl Undecylenate, Cetyl Alcohol, Citric Acid, Sodium Citrate, Phytic Acid, Benzyl Alcohol, Potassium Sorbate, Sodium Benzoate, Parfum**, Farnesol, Linalool, Limonene, CI 77891***, CI 77492***, CI 77491***, CI 77499***.
* Procedente de la agricultura ecológica.
** Procedente de aceites esenciales naturales.
*** Picmentos minerales.Modo de empleo.
Aplicar uniformemente antes de la exposición solar. Repetir al menos cada 2 horas para mantener la protección o con mayor frecuencia especialmente después de sudar, nadar o si nos secamos con una toalla.
Valoración.
Ya os digo que me voy a dejar muchas cosas en el tintero para no extenderme, porque creerme, podría estar horas y horas hablando de este producto.
Para empezar, si me conocéis un poquito ya, sabréis que soy de esas quisquillosas que si algo no les entra por la vista... mal, a la par que no me gustan los diseños recargados al más puro estilo "rococó".
Así pues, cuando vi el diseño de la caja y producto, bueno sinceramente, el diseño de todos los productos de Dhyvana, mis ojos se tornaron en corazoncitos como el archifamoso emoticono del Whatssap.
Un diseño fresco, sencillo, limpio y con una tonalidad de colores, que personalmente me aportaron confianza y una asociación inmediata al bienestar. (Ya sabéis que los colores, seamos conscientes o no, juegan un papel muy importante).
Pero centrándome en el producto SPF50, su envase y caja combina los colores blanco y verde menta, que ya sabéis que me chifla ese color, y nos aparece la hoja del logo de Dhyvana, que es sencillamente bonita.
Guiándome por los consejos de Aurora, mi asesora personal del equipo Dhyvana, lo he usado para los días de piscina, para esos encuentros en terracitas con amig@s y para las excursiones por el campo y montaña, ya que han sido los momentos en que más he estado expuesta al sol y al tener una protección mayor era el ideal para esos momentos, por lo que me he reservado el SPF30, del que os hablaré a continuación, para momentos de menos exposición.
Aunque no es un maquillaje debo confesar que sí lo he usado como tal, es decir, podríamos decir como base, en esos días en que no he tenido ni pizca de ganas de ponerme capas de maquillaje, para evitar parecer un muñeco de cera deshaciéndose a causa de las temperaturas extremas que tenemos en mi tierra. Vamos, me he aplicado la crema, un poco de eyeliner y a correr, pero ojo, aunque aporta un toque de color y unifica a la perfección el tono de piel, no penséis que aporta la misma picmentación que un maquillaje, porque no es así. Pero al tener una piel hipermega blanca, toque de color que aporta este protector, que no nos olvidemos, es un protector, a mi me vale y sobra.
Sobre su textura, es un poco densa, pero se extiende a la perfección, y aunque al principio deja un tono blanquito (recordad que es una crema) se absorbe muy rápidamente y lo mejor de todo, no te deja la piel para nada grasienta, cosa que puede pasar con algunos protectores solares faciales, y súper uniforme.
El olor, es casi impredecible, pero si te fijas, bueno si agudizas un poco el sentido del olfato sí se aprecia un toque muy sutil a una combinación de plantas, creo que el que más aprecio es el romero, pero ya os digo, es muy sutil.
SPF30 PROTECTOR SOLAR ECOLÓGICO.
De este protector podría decir lo mismo que os he comentado sobre el SPF50, con la diferencia que el grado de protección es más baja y que en esta ocasión han añadido aceite ecológico de frambuesa, aceite fotoprotector de amplio espectro UV, además de contener tocoferoles y agentes antioxidantes naturales que son muy efectivos, lo que hará que nuestra piel esté protegida de la aparición de radicales libres y del estrés oxidativo.
En su formulación, igual que en el anterior, se ha añadido un toque de color.
Envase de 50ml y su precio es de 18,50€.
Ingredientes.
Aloe barbadensis Leaf Juice*, Caprylic/capric Triglyceride, Titanium Dioxide, Maltodextrin, Propanediol, Decyl Oleate, Alcohol*, Mica, Zinc Oxide, Cetearyl Alcohol, Polyglyceryl-6 Distearate, Coco-caprylate, Rubus idaeus Seed Oil*, Bisabolol, Alumina, Stearic Acid, Glyceryl Caprylate, Cetearyl Glucoside, Tocopherol, Polyglyceryl-3 Beeswax, Xanthan Gum, Glycerin*, Aqua, Cetyl Alcohol, Glyceryl Undecylenate, Citric Acid, Sodium Citrate, Phytic Acid, Benzyl Alcohol, Sodium Benzoate, Potassium Sorbate, Parfum**, Farnesol, Linalool, Limonene, CI 77891***, CI 77492***, CI 77491***, CI 77499***.
* Procedente de la agricultura ecológica.
** Procedente de aceites esenciales naturales.
*** Picmentos minerales.Modo de empleo.
Al igual que el SPF50, aplicar uniformemente antes de la exposición solar. Repetir al menos cada 2 horas para mantener la protección o con mayor frecuencia especialmente después de sudar, nadar o si nos secamos con una toalla.
Valoración.
El formato de envase y caja es el mismo que el anterior, lo único que cambia es la combinación de colores, que en este caso juega con el rojo, el rosa y el blanco.
Este producto es mi protector para mi día a día. Igual que en el anterior gracias a su toque de color, lo estoy usando a modo de maquillaje también, aunque os recuerdo que no lo es puesto que no aporta una picmentación como la que podremos encontrar en una base de maquillaje, pero para mí es ideal puesto que no suelo maquillarme en exceso durante el día, y menos para ir al trabajo.
A diferencia del anterior su textura es más fluida, y el tono es un pelín más oscuro, pero sí que igual que el SPF50, se extiende a la perfección y se absorbe de inmediato, dejando mi piel luminosa e hidratada.
Tema olor, me pasa también como con el SPF50, no se aprecia a priori pero sí si agudizas el olfato puedes apreciar el toque de mezcla de plantas.
POST SOLAR.
El hecho de que expongamos nuestra piel a diario a la radiación solar provoca que se produzca una oxidación celular, tal y como os he comentado antes, lo cual hace que se deteriore la elastina y el colágeno de nuestra piel a la vez que se acelera el proceso de envejecimiento cutáneo.
Por ello es de vital importancia que reparemos la piel tras una exposición solar para poder prevenir el desgaste prolongado y el estrés oxidativo.
Este post solar esta formulado con una base de aloe vera y aceite de rosa mosqueta, ingredientes que están complementados con extractos de tulsi, cardo mariano y alga verde, especialmente indicados para calmar y nutrir la piel dañada.
Tiene propiedades antiinflamatorias que ayudarán a calmar la piel y a recuperar el equilibrio después de la exposición solar, a la par que estimulan la formación de colágeno e inhibe su degradación.
Es un producto apto para todo tipo de pieles y está testado dermatológicamente para pieles sensibles.
Su envase contiene 50ml y su precio es de 15€.
Ingredientes.
Aloe barbadensis Leaf Juice*, Maltodextrin, Glycerin*, Coco-Caprylate/Caprate, Coco-caprylate, Cetearyl Alcohol, Jojoba esters, Arachidyl Alcohol, Aqua, Propanediol, Helianthus annuus Seed Wax, Rosa canina Fruit Oil*, Acacia decurrens Flower Wax, Enteromorpha compressa Extract, Calendula officinalis Flower Extract*, Silybum marianum Fruit Extract, Ocimum sanctum Leaf Extract, Behenyl Alcohol, Glyceryl Caprylate, Arachidyl Glucoside, Xanthan Gum, Tocopherol, Cetearyl Glucoside, Glyceryl Undecylenate, Polyglycerin-3, Citric Acid, Phytic Acid, Benzyl Alcohol, Potassium Sorbate, Sodium Benzoate, Parfum**, Limonene, Linalool.
* Procedente de la agricultura ecológica.
** Procedente de aceites esenciales naturales.
Modo de empleo.
Aplicar uniformemente tras la exposición solar, especialmente en las zonas dañadas, irritadas o enrojecidas. Utilizar cada día para poder reparar la piel de un modo activo de los daños causados por la exposición solar.
Valoración.
Siguiendo el formato del envase y caja de los protectores, el post solar combina el color amarillo con el blanco, más veraniego imposible.
De este post solar, tengo mucho y poco que contaros a la vez. Me explico, mucho porque podría exprimir cada detalle de él y estaría horas y no es plan, y poco porque simplemente cumple perfectamente con las funciones de un post solar, es decir, calma la piel al instante y deja una sensación de frescura e hidratación máxima.
Lo estoy usando a diario después de llegar a casa y haberme limpiado la cara de impurezas.
Respecto al producto en esta ocasión deciros que no contiene colorante, vamos es una crema blanca y al igual que los protectores se extiende y absorbe a la perfección.
CONCLUSIÓN.
Sin duda los tres productos cumplen a la perfección con su cometido, con el plus que son totalmente respetuosos con nuestra piel a la par que ayuda que la mimemos como se merece.
Cierto es que son productos que quizás relacionemos más con el verano, pero no debemos olvidar que durante todo el año, e incluso los días nublados, estamos exponiendo nuestra piel a los rayos solares, así que personalmente creo que son unos productos ideales para todo el año.
Dicho esto, ¿los recomiendo? Sin ninguna duda, porque además de ser productos de calidad y que cumplen de sobra con sus funciones, tienen el plus de que el equipo de Dhyvana te pone las cosas muy fáciles, es decir, te informa en todo momento, te aconseja, te resuelve dudas,... vamos son un amor. Aunque en especial, debo mencionar a Aurora, puesto que ha sido mi persona de contacto y la que me ha informado, me ha aconsejado y la que ha tenido una paciencia monumental conmigo. Pero tampoco quiero olvidarme de Juan y Daniel.
Otra cosa a destacar, antes de terminar con el post, el mensaje que puedes encontrar en todos los productos de la línea ECO SUNCARE, "you are beautiful". Que sin duda, personalmente, me dan un chute de positividad cada vez que abro cada uno de los envases, y llamadme tonta, hace que nazca en mi rosto una leve sonrisa; primero porque ¿a quién no le gusta que le recuerden que una es preciosa? y segundo, porque gracias a Dhyvana, aunque por suerte existen muchas firmas con valores similares, no todo está perdido, es decir, siguen existiendo empresas que trabajan por y para las personas sin tener en cuenta los números y el símbolo del euro.
¡Un saludo maj@s!
