Con la llegada del nuevo año, por lo general, solemos hacer la famosa lista de propósitos con la esperanza que durante los próximos 365 días nos de tiempo a cumplir todos y cada uno de ellos, o a lo sumo, la gran mayoría.
Entre el top de los tops, existen lo de "ir al gimnasio" o "ponerme en serio con el inglés", entre muchos otros, que dependerán de las aspiraciones y gustos de cada uno.
Lo que no solemos hacer, aunque quizás me equivoque, es centrarnos en una lista o algo parecido a ello, de las cosas que no queremos para ese nuevo año, vamos, los "des- propósitos".
Y de eso irá mi post de hoy, de algunos de mis "des-propósitos" para el 2018.
CALLADITA NO ESTOY MÁS MONA
Aunque no suelo ser de esas personas que se callen las cosas porqué sí, aunque a veces sí lo hago por educación, cierto es que si lo pienso bien, creo que en general nos callamos muchas cosas (sea por la razón que sea).
Pero no se qué pensaréis vosotr@s, pero llega un punto que no, que callados no estamos más monos.
Si tenemos el "don" de la palabra, aunque hay muchos que en lugar de un don puede ser una desgracia, no entiendo porqué no podemos decir todo lo que pensamos, siempre hi cuando lo hagamos de un modo coherente y claro está, sin el afán de faltar o herir a nadie.
Por ejemplo; yo que estoy metida en el mundo blogger desde hace unos años, no entiendo a esas blogueras que no aceptan una mala crítica. Es decir, por ejemplo, una vez a una blogger le dije que aunque valoraba su opinión pero que no estaba de acuerdo con sus impresiones. Claro está que las argumenté, todas y cada una de ellas de un modo respetuoso con su trabajo y creo que incluso jovial. ¡Pues no veas la que se armó! Vamos, que si no opinaba igual que ella, no tenía derecho a comentar (más o menos eso es lo que me dijo por privado después de borrar mi comentario).
No sé, si te expones a la opinión pública deberías aceptar todo tipo de comentarios, ¿no?
Yo misma he recibido críticas malas en algunos de mis artículos, ¿y? ¿Acaso tengo que cabrearme como una mona porque alguien no opine lo mismo que yo? ¡Para nada!
Y por otro lado, sabéis que muchas veces colaboro con empresas o participo en proyectos de plataformas para probar productos y hablar sobre ellos, aunque últimamente lo hago a conta gotas, no sé si os habréis fijado. ¿Por qué? Pues porque a muchas empresas no les gusta que dé una opinión sincera y real, y les beneficia más contactar con bloggers que todo lo ven de color de rosa y que todo les gusta y funciona a la perfección. Yo debo ser un bicho raro, no sé, pero si algo no me gusta lo digo, o si me gusta pero hay algo en él que no termina de convencerme, también lo digo, y claro está si es la pera limonera, lo grito a los cuatro vientos.
Yo misma he recibido críticas malas en algunos de mis artículos, ¿y? ¿Acaso tengo que cabrearme como una mona porque alguien no opine lo mismo que yo? ¡Para nada!
Y por otro lado, sabéis que muchas veces colaboro con empresas o participo en proyectos de plataformas para probar productos y hablar sobre ellos, aunque últimamente lo hago a conta gotas, no sé si os habréis fijado. ¿Por qué? Pues porque a muchas empresas no les gusta que dé una opinión sincera y real, y les beneficia más contactar con bloggers que todo lo ven de color de rosa y que todo les gusta y funciona a la perfección. Yo debo ser un bicho raro, no sé, pero si algo no me gusta lo digo, o si me gusta pero hay algo en él que no termina de convencerme, también lo digo, y claro está si es la pera limonera, lo grito a los cuatro vientos.
Pero bueno, estos son solo un ejemplo, sin más, que conste, y ya he hablado quizás mucho sobre ello, así que no me voy a extender más.
A lo que me refiero, es que no deberíamos censurarnos tanto y hacer valer nuestras opiniones, pese a quien le pese.
MI TRABAJO COMO BLOGGER NO VALE UNA MUESTRA
Aunque lleve solo unos minutos escribiendo este post, hasta que os diga adiós en el mismo, pasarán varios minutos, e incluso una o más horas. Después vendrá la búsqueda de fotografías, la edición de las mismas para que se vea un post la mar de mono, a lo que deberemos sumar una media hora más, como mínimo.
Y eso que este es uno de esos post de opinión personal, vamos no tengo que estar recapitulando información en libros y apuntes, o ponerme súper pesada con colegas para hacerles consultas (sí, aunque parezca mentira no lo sé todo y me nutro también de informaciones e opiniones de expertos en ciertos temas para realizar mis artículos..), con los que el tiempo de dedicación aumenta.
Como tampoco es un post de esos en los que pruebo un producto durante un tiempo para poder hablar sobre él de un modo sincero, ni tengo que hacer fotos, editarlas de nuevo, etc..., que claro está, es otra inversión y dedicación de tiempo sumamente más elevado de la que voy a dedicar a este post que estáis leyendo.
Pues bien, aunque mi blog no sea un blog influyente, vamos de esos con millones de seguidores, ni tengo grandes aspiraciones (forrarme), mi tiempo vale, y no, no se me puede "pagar" con un par de muestras que me dan gratis en cualquier establecimiento y encima valorarlas. Ya os hablé de ello en mi artículo no todo vale así que tampoco me voy a enrollar mucho sobre ello. Simplemente que esta premisa va a seguir presente e incluso voy a intentar autovalorarme más, porque sí,¡porque yo y mi trabajo lo vale!
NO VOY A COMPARARME CON NADIE NI DEJARÉ QUE ME COMPAREN
Hace unos días hablando con un amigo me comentó: "¡No veas Carolina! ¿Recuerdas aquella chica que empezó como administrativa en esa empresa y con 29 ya es directora. Además se ha comprado un piso de aupa con su novio, que por cierto, se casan em el 2018. Y mira nosotros...".
¿Perdona? ¿Y mira nosotros? Wtf?
Yo me miro sí, y estoy la mar de contenta con quien soy, con mis trabajos (sí tengo más de uno, es lo que tiene ser un culo inquieto y a la par no tener ni un duro jajaja), vivo en un casoplón (vale, es de mi madre pero soy su "okupa" favorita) y tema pareja, no tengo porque justificarme con nadie si tengo o no.
Aunque claro que me alegro que los demás avancen en la vida, que consigan logros o lo que sea, pero no me compares porque no sabes nada de lo que yo quiero. Quizás con lo que tenga soy la persona más feliz del mundo o cierto es que quizás, no he buscado o anhelado tener todo ello, o simplemente no he tenido la misma "suerte" o puede que no quiera todo eso en mi vida.
No se si me explico. La gente tiene la tendencia enfermiza en comparar a la gente, e incluso nosotros mismos caemos en el error de hacerlo. ¿
"Si soy de color morado, ¿por qué tengo que ser de color rosa?"
Yo no sé qué opinaréis vosotr@s, pero yo tengo claro que la vida de los demás es su vida y no la mía, y que yo tengo que velar por mi bienestar, mi felicidad y mis objetivos, que no tienen porque ser los mismo que tienen los demás.
NO QUIERO TENERLO TODO BAJO CONTROL NI PLANIFICAR TODAS MIS HORAS
Lo sé, por las redes sociales os he dicho millones de veces que mi gran defecto es la poca organización y que es algo que tengo que mejorar, pero sin obsesionarme.
Es decir, es bueno tener un calendario, agenda, planner, o como queráis llamarlo, lo que creo que no es bueno es querer tener todo lo que concierne a vuestra vida bajo control y a todas horas. Vamos, a mí solo de pensarlo me produce un agobio...
No sé a vosotros si os pasa pero a mí me encanta improvisar, sacarme un plan en segundos de bajo la manga y chim pom, sin pensarlo, vamos, un poco dejar que me autosorprenda, aunque cierto es que no siempre sale bien, pero oye, eso es parte de la salsa de la vida.
No somos robots, no podemos controlarlo todo, no tenemos tampoco porque ponernos metas y metas que cumplir, simplemente, creo, que debemos vivir, sin más.
Claro está que hay cosas que es necesario tener un tanto controladas, más que nada para que todo no se vaya a pique, pero tengo claro que no, no voy a ser esclava de expectativas ni de calendarios.
Y la lista sigue, vaaaaaaaaaamos si sigue, porque hay muchos des-propósitos que quiero seguir cumpliendo o empezar a hacerlo para este 2018, pero creo que por hoy es suficiente y la idea del post creo que está más que clara (o eso espero).
Cierto es que podría ser una lista de propósitos común de cualquier persona, pero como tendemos a centrar en ellas las cosas que sí queremos, quería hacer hincapié en las que no queremos.
Pues nada maj@s, cierro ya por hoy deseando que hayáis tenido un buen inicio de año y que durante el 2018 se cumplan todos vuestros deseos/ propósitos y como no, des-propósitos.
¡Un saludo maj@s!
MI TRABAJO COMO BLOGGER NO VALE UNA MUESTRA
Aunque lleve solo unos minutos escribiendo este post, hasta que os diga adiós en el mismo, pasarán varios minutos, e incluso una o más horas. Después vendrá la búsqueda de fotografías, la edición de las mismas para que se vea un post la mar de mono, a lo que deberemos sumar una media hora más, como mínimo.
Y eso que este es uno de esos post de opinión personal, vamos no tengo que estar recapitulando información en libros y apuntes, o ponerme súper pesada con colegas para hacerles consultas (sí, aunque parezca mentira no lo sé todo y me nutro también de informaciones e opiniones de expertos en ciertos temas para realizar mis artículos..), con los que el tiempo de dedicación aumenta.
Como tampoco es un post de esos en los que pruebo un producto durante un tiempo para poder hablar sobre él de un modo sincero, ni tengo que hacer fotos, editarlas de nuevo, etc..., que claro está, es otra inversión y dedicación de tiempo sumamente más elevado de la que voy a dedicar a este post que estáis leyendo.
Pues bien, aunque mi blog no sea un blog influyente, vamos de esos con millones de seguidores, ni tengo grandes aspiraciones (forrarme), mi tiempo vale, y no, no se me puede "pagar" con un par de muestras que me dan gratis en cualquier establecimiento y encima valorarlas. Ya os hablé de ello en mi artículo no todo vale así que tampoco me voy a enrollar mucho sobre ello. Simplemente que esta premisa va a seguir presente e incluso voy a intentar autovalorarme más, porque sí,¡porque yo y mi trabajo lo vale!
NO VOY A COMPARARME CON NADIE NI DEJARÉ QUE ME COMPAREN
Hace unos días hablando con un amigo me comentó: "¡No veas Carolina! ¿Recuerdas aquella chica que empezó como administrativa en esa empresa y con 29 ya es directora. Además se ha comprado un piso de aupa con su novio, que por cierto, se casan em el 2018. Y mira nosotros...".
¿Perdona? ¿Y mira nosotros? Wtf?
Yo me miro sí, y estoy la mar de contenta con quien soy, con mis trabajos (sí tengo más de uno, es lo que tiene ser un culo inquieto y a la par no tener ni un duro jajaja), vivo en un casoplón (vale, es de mi madre pero soy su "okupa" favorita) y tema pareja, no tengo porque justificarme con nadie si tengo o no.
Aunque claro que me alegro que los demás avancen en la vida, que consigan logros o lo que sea, pero no me compares porque no sabes nada de lo que yo quiero. Quizás con lo que tenga soy la persona más feliz del mundo o cierto es que quizás, no he buscado o anhelado tener todo ello, o simplemente no he tenido la misma "suerte" o puede que no quiera todo eso en mi vida.
No se si me explico. La gente tiene la tendencia enfermiza en comparar a la gente, e incluso nosotros mismos caemos en el error de hacerlo. ¿
"Si soy de color morado, ¿por qué tengo que ser de color rosa?"
Yo no sé qué opinaréis vosotr@s, pero yo tengo claro que la vida de los demás es su vida y no la mía, y que yo tengo que velar por mi bienestar, mi felicidad y mis objetivos, que no tienen porque ser los mismo que tienen los demás.
NO QUIERO TENERLO TODO BAJO CONTROL NI PLANIFICAR TODAS MIS HORAS
Lo sé, por las redes sociales os he dicho millones de veces que mi gran defecto es la poca organización y que es algo que tengo que mejorar, pero sin obsesionarme.
Es decir, es bueno tener un calendario, agenda, planner, o como queráis llamarlo, lo que creo que no es bueno es querer tener todo lo que concierne a vuestra vida bajo control y a todas horas. Vamos, a mí solo de pensarlo me produce un agobio...
No sé a vosotros si os pasa pero a mí me encanta improvisar, sacarme un plan en segundos de bajo la manga y chim pom, sin pensarlo, vamos, un poco dejar que me autosorprenda, aunque cierto es que no siempre sale bien, pero oye, eso es parte de la salsa de la vida.
No somos robots, no podemos controlarlo todo, no tenemos tampoco porque ponernos metas y metas que cumplir, simplemente, creo, que debemos vivir, sin más.
Claro está que hay cosas que es necesario tener un tanto controladas, más que nada para que todo no se vaya a pique, pero tengo claro que no, no voy a ser esclava de expectativas ni de calendarios.
Y la lista sigue, vaaaaaaaaaamos si sigue, porque hay muchos des-propósitos que quiero seguir cumpliendo o empezar a hacerlo para este 2018, pero creo que por hoy es suficiente y la idea del post creo que está más que clara (o eso espero).
Cierto es que podría ser una lista de propósitos común de cualquier persona, pero como tendemos a centrar en ellas las cosas que sí queremos, quería hacer hincapié en las que no queremos.
Pues nada maj@s, cierro ya por hoy deseando que hayáis tenido un buen inicio de año y que durante el 2018 se cumplan todos vuestros deseos/ propósitos y como no, des-propósitos.
¡Un saludo maj@s!
